jueves, 31 de julio de 2008

LLUVIA VERDE Y AZUL FRENTE A UN FILIDH VALIENTE

Obsérvame Dios mío,
soy una hojita leve
en un jardín eterno..

Soy una hojita leve…
Soy un Filidh hambriento.

Obsérvame Dios mío.
Es este corazón
un reflejo del tiempo,
una canción secreta,
petición de un anhelo…

Obsérvame Dios mío,
en medio de la vida,
merecedor del cielo.

Voy azul en la niebla,
voy como gota suave,
voy como sed de niño.
No tengo edad terrestre
(primum angelus tempore)…

Soy una hojita leve,
Soy un Filidh hambriento

Tanto dolor y olvido
sobre mi sueño intenso,
sobre esta vida rara…
¿ quién soy que de milagros
Muevo mi extraño cuerpo?...

Una tristeza inmensa
desde la lluvia escuálida…
He allí el azul que llueve
sobre la verde calma
de esta mañana dulce
húmeda gris y pálida…

Los campos enjugados
por ese llanto suave
penetran este anhelo
de corazón que siente
la sensación del tiempo.

Soy una hojita leve,
Soy un Filidh hambriento.

A lo lejos… siluetas
en lo que fuera estancia
de un presente perdido
entre sueños y estampas…

Heme Dios mío ¡heme!
sintiéndome una hojita
del misterio infinito…
El gris, la lluvia, el tiempo
de raro azul violáceo
en la mañana quieta…

Catarí nuevamente
y el corazón tañendo.
Quinn ese amigo viejo
de este vivir interno…

Niebla en la carretera,
gotas de lluvia tenue…
Algo hay adentro ¡hay algo!
que me grita en lo dulce
pleno de sutileza:
¡Poeta, eres poeta !
¡ Nadie podrá borrarte
de la historia celeste !

Soy una hojita leve,
soy un Filidh hambriento.

¡Nadie podrá arrancar
ya tu nombre en la página
de algún alma que acaso
probó tu azul deleite ¡.

Dios, soy tu hojita leve..
en el cosmos sin fecha…!
Soy tu visión tranquila
de sublime tristeza
y de alegría verde,
mientras el tiempo llueve
hacia el valle la hojita,
hacia el cosmos la estrella.

Soy una hojita leve,
Soy un Filidh hambriento

Y Quinn mirando al cielo,
reencarnando en belleza,
y yo buscando el dúctil
Llanto azul del instante
sobre los pinos quietos
que saben mi existencia…

Mírame Dios, soy tuyo,
la hojita frágil-fuerte
en medio del agreste
corazón del planeta.

Cuando la niebla cubre
de olvidos mi inocencia,
Tú me encuentras y nombras
en tu vasta existencia:

Ese eres tú poeta,
mi criatura eterna
¡constante del reflejo
propio de mi Presencia!

¡ Eres mi hojita leve,
eres el niño-Filidh,
verde azul de mi huerto..!

¡Criatura dulcísima
dentro del Universo…!.


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No. 03-2006-111013335100-01-